Es importante la renovación política y de
políticos en los partidos. Pero que sepáis que es una demanda de la ciudadanía.
El desapego de la gente no es porque no les interese la política, no es porque
no valoren la importancia de la política sino porque quieren cambios. Muchos de
los que estamos en la primera fila debemos dar un paso atrás y ayudar al relevo
generacional. Y quien crea que solo se aporta a la ciudadanía siendo alcalde o
concejal, se equivoca. Estar en política es garantizar el espacio personal a
favor de principios y ser activo en aportar lo mejor de sí mismo en cada una de
las oportunidades vitales que una persona tiene. Así es como yo pienso, así es
como una persona socialista piensa.
Muchos podrán decir que ser joven no es garantía
de capacidad, de compromiso, de honestidad. Pues claro, las garantías
personales hay que demostrarlas y hacerlas patentes en cada comportamiento, en
cada acción, en cada discurso, y sobretodos en la trayectoria vital que nos
pone en las buenas y en las malas. Ahí es donde se ve. Pero estaréis conmigo
que al no tener contaminantes del pasado, al estar en la ilusión del inicio, y
al recibir el apoyo y el conocimiento acumulado por los veteranos que dan un
paso atrás pero no tienen resentimiento ni se sienten relegados, serán garantía
de éxito en la labor que se les pide a los jóvenes.
Yo no quiero tutorizar, quiero participar desde
la segunda fila. Se que seguiré defendiendo las políticas progresistas, de
igualdad y afianzamiento de derechos de todas y cada una de las personas. Yo
estaré siempre en política porque me gusta y porque estoy convencida de que la
participación es importantísima para construir el presente y el futuro de
nuestra sociedad. Y porque sigo pensando que todos somos piezas importantes
para la convivencia en paz y para el progreso social.
